Meditación Para Esclarecer La Visión Personal

Siéntate en un lugar cómodo y tranquilo. Empezamos el ejercicio de meditación…

Hoy es un día aleatorio de un año lejano.

Tú has llegado a tu edad de jubilación.

Estás frente al espejo y estás tranquilo y en paz.

Observa la imagen en el espejo.

Observa tu mirada.

Las líneas en tu cara.

La expresión en tu cara.

¿Qué expresa tu cara?

Tu carrera profesional ha llegado a su fin.

¿Qué aportaciones has realizado en tu campo?

¿Cuáles son tus logros profesionales?

¿Y ahora? ¿Vas a continuar prestando algún servicio al mundo? ¿O vas a descansar?

Empieza a caminar por los espacios de tu casa.

Lentamente.

¿Cómo es el lugar donde vives?

¿Cómo son las paredes?

¿Como es el cuarto de baño?

¿Cómo es tu habitación?

¿Cómo es la cocina?

¿Cómo son las ventanas?

¿Cómo está decorada?

Caminas hacia el salón de tu casa y te encuentras a tu familia esperándote. La familia que has formado.

¿Cómo es el salón?

¿A quién ves?

Observa a tu familia…

¿Con qué expresión facial te observan?

¿Cómo se comportan contigo?

¿Qué te dicen?

Caminas por el pasillo y abres la puerta de la entrada.

Sales a la calle.

Observa el vecindario donde vives.

¿Qué ves?

Te encuentras a un grupo de vecinos y vecinas y te observan a medida que te acercas.

¿Cuál es su expresión facial al verte?

¿Qué te dicen?

Caminas de vuelta a casa y ves cómo, al acercarte, las luces de tu casa se apagan.

Abres la puerta y caminas dentro.

De repente se enciende una luz y un grupo de personas, incluida tu familia, te esperan con una celebración sorpresa.

También están las personas con las que has trabajado durante los últimos años.

Hay algunos vecinos y amigos.

Alguien se acerca a ti y te dice que es momento de celebrar toda una vida de éxitos.

Durante los próximos minutos, apagarás una vela por cada éxito de tu vida.

Piensa en cada uno de esos éxitos, uno a uno, a medida que vas apagando velas, lentamente.

Las personas de tu fiesta empiezan a marcharse, una a una.

Se despiden de ti con un abrazo y te felicitan.

Ha llegado el momento de irse a la cama.

Te sientas en el borde de la cama con tu ropa de dormir.

Te giras y te tapas.

¿Hay alguien a tu lado?

Cierras los ojos lentamente y te duermes con el corazón desbordante de satisfacción por una vida plena y feliz.